Deudor vs. Acreedor: Una Comparación En Profundidad
Cuando revisamos un contrato, sea este escrito u oral, encontramos principalmente los dos agentes que intervienen en el mismo: el proveedor y el receptor. La diferencia entre los dos está bien definida para que cada uno conozca cuáles son sus responsabilidades concretas.
Pero hay algo más que une a los dos agentes del contrato: la deuda que puede generarse frente a la transacción. Esta deuda siempre se debe solventar, de ahí que sea tan importante tener en cuenta las obligaciones financieras que tienen tanto el proveedor como el receptor.
Por ejemplo, en los casos en que el contrato no se ha firmado por escrito, como ocurre con los minicréditos al instante que se dan entre familiares o amigos de, pueden presentarse problemas de carácter legal que merecen la pena comentar para saber a qué nos exponemos.
De hecho, no importa si el contrato tiene que ver con la prestación de un servicio o la compra de un bien, la deuda que se genera necesita resolverse en base a unas directrices claras que se acuerdan entre las dos partes. Ahora bien, ¿qué es el deudor y el acreedor exactamente?
En este post explicaremos la diferencia entre el deudor y el acreedor con detenimiento. Para ello, haremos un análisis de comparación en profundidad con el objetivo de que podamos comprender las obligaciones financieras establecidas en un contrato de minicréditos rápidos.
Entendiendo A Deudores y Acreedores
Como sabemos, un contrato se compone de dos agentes que se responsabilizan del acuerdo al que han llegado: el proveedor y el receptor . La diferencia del proveedor y el receptor es que el primero es aquel que provee un bien, servicio o prestación, y el receptor es quien los recibe.
Por tanto, todo contrato es una transacción entre alguien que da algo y otra persona que se beneficia de la entrega. La consecuencia de una transacción donde las obligaciones no se han cumplido es una deuda que el deudor ha contraído con el acreedor, a quien se le debe algo.
La diferencia entre el deudor y el acreedor es que el deudor es siempre una persona física o jurídica que no ha cumplido con su obligación financiera, mientras que el acreedor es una persona física o entidad que espera recibir algo acordado en el contrato entre las dos partes.
Saber qué es un deudor y acreedor es incluso más fácil de entender si pensamos en los contratos donde se dan minicréditos. Con estos contratos siempre habrá una deuda donde la persona que solicita minicréditos rápidos tiene que devolverlos a la entidad que los concede.
Pero más allá de estos tipos de contratos, lo fundamental es comprender que el deudor puede ser cualquier persona física o jurídica (empresas, individuos, sociedades y organismos, por ejemplo) frente al acreedor, que también puede ser una persona o una entidad, como un banco.
Diferencias Entre Deudor y Acreedor
Aparte de la evidente diferencia entre el deudor y el acreedor acerca de la deuda que se contrae dentro del contrato, hay más claroscuros que deben conocerse a nivel legal. Esto es porque cada parte puede defender y proteger sus derechos si la legalidad así lo permite.
¿A qué nos referimos con esto? A que el deudor o acreedor cuenta con derechos legales y cada parte está comprometido a respetarlos, por lo que quien debe algo al proveedor también tiene vías para protegerse de posibles amenazas, acoso o límites que se han sobrepasado.
Además, parte de saber qué es un deudor es tener muy claro que este no siempre es culpable de que haya contraído la deuda. Para comprender por qué a veces el deudor no es culpable de contraer una deuda, pondremos el ejemplo de un receptor que no sabe que firmó un contrato.
En estos casos, el acreedor puede terminar llegando a un acuerdo para resolver la deuda amistosamente. Por cierto, aunque el deudor siempre tendrá que devolver lo que debe, también puede exigir preservar su privacidad y conocer la información total acerca de la deuda.
La diferencia entre deudor y acreedor es que al acreedor se le debe algo, pero este último no tiene la potestad de usar ilegalmente los datos personales del deudor o de acosarlo para tratar de que cumpla lo que dicta el contrato. En este caso, el deudor podría demandar al acreedor.
Consejo de Expertos: Navegando Por La Deuda y El Crédito
Aclarado el significado entre deudor y acreedor, es hora de dar algunos consejos para que la deuda se resuelva sin mayores obstáculos, antes de iniciar un procedimiento judicial. Lo más aconsejable es comenzar por intentar llegar a un acuerdo, poniendo un nuevo plazo de pago.
Si somos nosotros los deudores, lo mejor que podemos hacer es atender la primera llamada que nos hace el acreedor para poder aplazar el pago de aquí a unos meses. Si ignoramos las llamadas y toques de atención, será difícil llegar a negociar la deuda con mayor flexibilidad.
Por otro lado, es aconsejable que bajo ninguna circunstancia demos datos personales al acreedor. Parte de proteger nuestros derechos es evitar divulgar información como nuestro número de cuenta bancaria. El acreedor, a su vez, debería enviar los datos sobre la deuda.
En los casos en que, como deudores, no estamos de acuerdo con la cantidad de dinero que se nos reclama o con la forma de proceder de la persona jurídica o empresa acreedora, siempre podemos contactar con un abogado. El acreedor también puede iniciar sus propios trámites.
Por ejemplo, si se diera la situación de que el deudor sigue sin resolver su cuenta pendiente con el acreedor, los expertos recomiendan utilizar los servicios de reclamación de deudas para hacer la reclamación pertinente de forma más fácil, cómoda y barata, sin procesos judiciales.
Estos servicios actúan a través de procesos extrajudiciales en el nombre del acreedor, y el objetivo es reclamar el impago al deudor. En definitiva, esta es una buena táctica para recuperar la deuda sin tener que pasar por procedimientos tan tediosos como son los juicios.